¿El arte, el deporte y los valores?
¡Existe una relación entre ellos!
Conoce un poco más acerca de...
El arte, que es el concepto que engloba todas las creaciones realizadas por el ser humano para expresar una visión sensible acerca del mundo, ya sea real o imaginario. Mediante recursos plásticos, lingüísticos o sonoros, el arte permite expresar ideas, emociones, percepciones y sensaciones.
El deporte, conocido como la práctica de un ejercicio físico regulado y competitivo. Éste puede ser recreativo, profesional o como una forma de mejorar la salud.
- Valores éticos, que son aquellos que forman parte de las obligaciones de las personas, el conjunto de reglas o normas que nos permite hacer el bien.
- Valores estéticos, cuyo estudio es la percepción o concepto de la belleza en relación a sus cualidades estéticas. Estos se fijan de las apariencias y valoración de cualquier cosa.
Entonces, ¿cómo se relacionan?
El arte y deporte son formas de expresión cuyas huellas y manifestaciones se pueden ver a través de las distintas etapas de la humanidad. El arte ha sido desde siempre uno de los principales medios de expresión del ser humano a través del cual manifiesta sus ideas y sentimientos, forma como se relaciona con el mundo.
El deporte es una herramienta muy interesante para conseguir valores. Fundamentalmente, el problema está en no darse cuenta de que el deporte tiene una finalidad como juego que es ganar, pero que si se pone como único fin estamos perdidos, porque la competencia deportiva se convierte en un campo difícil al buscar derrotar al otro como sea. Si es un medio para seguir mejorando, entonces, si se pierde no pasa absolutamente nada porque esa derrota nos lleva a reconocer nuestros fallos para seguir mejorando. Y es cuando se comienza a hablar de valores: humildad, espíritu de superación, esfuerzo, respeto... El deporte como tal no educa en valores, todo depende de la utilización que se hace de él.
El arte, a su vez, se concibe como una herramienta para trabajar valores de respeto e inclusión que se centran, al mismo tiempo, en trabajar sobre los estereotipos de género por una parte, y sobre las personas con diversidades funcionales, por otra.
Estos dos conceptos de una manera nueva son una herramienta fantástica. Son dos lenguajes universales para crear una plataforma para unir a todos por la paz.